El líder de los populares barreños, David Gil, encabeza el proyecto de Gobierno reordenado en la Villa como consecuencia del acto con el PA, que supone la entrada del PP en el Ayuntamiento barreño por primera vez en su historia.
—¿Qué puede esperar el pueblo de Los Barrios del nuevo pacto de Gobierno?
—Puede esperar lo que queremos tanto PA como PP, que es conseguir la estabilidad del municipio, que los trabajadores puedan cobrar sus nóminas y, sobre todo, la estabilidad política. Lo que hemos vivido en este último año de legislatura lo hemos superado y, a partir de ahora, aportaremos un clima de confianza y tranquilidad y nos dedicaremos a lo que tenemos que dedicarnos, que es el futuro del municipio que, por la situación en la que está, va a ser difícil. Lo hemos reconocido cuando estábamos en la oposición y también lo reconocemos ahora: Es muy difícil gestionar una deuda de 200 millones y con 22.000 habitantes y la cartera totalmente gastada, y con que las partidas financieras que podían sacarnos de esta situación las agotaron los socialistas.
—¿Por qué se produce el pacto ahora y no al principio del mandato?
—Porque nosotros entendimos que el PA es el que ganó las elecciones, con un apoyo total de la ciudadanía. Aunque no logró la mayoría absoluta, sí estuvo muy cerca, y está claro y evidente que fue el que ganó. Entendíamos que debían ser ellos los que llevaran a cabo su proyecto para el municipio. La situación del Ayuntamiento es difícil, y aunque hayan adoptado decisiones erróneas o acertadas, entendíamos que no sólo faltaba ese Gobierno que había sido elegido por los ciudadanos y buscábamos estabilidad lo antes posible. Hemos mantenido contactos a través de Diputación con el Plan de Ayuda a municipios, y nosotros hemos visto la realidad del municipio cuando el plan recogía los ingresos, la deuda y la capacidad que tiene el Ayuntamiento.
—¿Cree que el apoyo del PP puede dar garantías de afrontar el pago de las nóminas?
—En ningún momento queremos crear falsas expectativas. La Diputación ha trabajado siempre sin mirar color político alguno y ha trabajado con este municipio siempre. Lo ha demostrado su presidente, José Loaiza, y el diputado de Hacienda, Juan Antonio Liaño, que han sacado esa herramienta para ayudar al problema de pago de nóminas. Ahora no significa que traigamos nosotros el dinero y solucionemos el problema. Vamos a trabajar y lo que sí vamos a garantizar es esa estabilidad de la que hablamos. La Diputación ha aprobado el plan de ayuda. Ahora dispone de 2,5 millones y, en el momento en el que ese dinero esté disponible, el plan seguirá adelante. Al fin y al cabo, tenemos a todas las administraciones de nuestra parte para lograr esa estabilidad con esa herramienta pionera de Diputación.
—Durante este tiempo habéis hecho una oposición firme. ¿Ha cambiado ahora vuestra posición?
—Nos hemos sentado los dos grupos, hemos reconocido por ambas partes los errores que hemos cometido, y al final ha primado solucionar el problema de los ciudadanos y ese equilibrio se encuentra con una mayoría holgada como la de ahora. Sí hemos analizado los programas electorales de cada partido y hemos intentado encauzar esos programas para que no haya ningún tipo de fisuras. El trabajo conjunto ha sido claro y con muchas ganas.
—¿Qué balance hacéis del año y medio de gestión del PA?
—Somos respetuosos con la justicia con respecto al tema de los amortizados. Este es el principal punto de desencuentro con el PA, no porque no entendíamos que había que despedir, que hemos sido el único partido que lo dijimos en la campaña, pero sí en el procedimiento. Lo primero que había que haber hecho era la RPT y no se hizo. Respecto a lo demás, se han hecho ajustes como nosotros en muchos municipios; austeridad, y hasta en el propio pacto ha primado un mínimo gasto político. Han hecho lo que han podido hacer con la deuda.
—¿Habéis planteado variar la hoja de ruta de Jorge Romero?
—Son formas de gestionar y yo respeto las del PA. Tiene su esquema marcado. Por desgracia, tenemos una situación muy complicada en el municipio. Quizás sí se puede hacer una estrategia o un sumario para seguir una gestión, pero son tantos problemas los que tiene el Ayuntamiento que muchas veces puedes ir en una dirección que a lo mejor no es en la que tienes que ir. Con una deuda de 200 millones, que te tienes que amarrar a la ley, es difícil mantener la hoja de ruta sin cambiarla. Hay que conseguir normalizar la nómina, la RPT, crear un buen convenio para los trabajadores del Ayuntamiento y dar los servicios mínimos a los ciudadanos. Pero que puede haber cambios, evidentemente. El propio Rajoy tenía una visión del país y, cuando vio cómo estaba, tuvo que tomar otras medidas. Ahora mismo estamos aterrizando en las áreas que vamos a llevar y ver la situación y poner nuestro punto de gestión, que no desencaminadas con el PA.
—Una de vuestras prioridades en campaña era hacer una auditoría externa. ¿La mantenéis?
—En la situación en la que nos encontramos, es difícil pagar la nómina, cuanto más la auditoría. El alcalde tiene una petición a la Cámara de Cuentas, y hay una respuesta a favor, lo cual nos parece estupendo.
—También hablabais de aprovechar el polígono industrial de cara al empleo...
—Llevo un día y hemos avanzado en muchas cosas con respecto al Ayuntamiento. En breve, tendremos noticias de iniciativas que podremos llevar para la creación de empleo y sigo pensando que el tesoro más preciado que tiene el Ayuntamiento, a parte de sus trabajadores y sus ciudadanos, es el empuje económico de nuestros emprendedores, las empresas de Los Barrios que, a pesar de la crisis, hay perspectivas de empezar a salir el año que viene. Esos emprendedores, que llevan tantos años en ese polígono, tenemos que trabajar conjuntamente con ellos para conseguir que Los Barrios deje de tener más de 3.000 parados.