Ha fallecido el actor británico David Warner, lo ha hecho a los 80 años de edad a causa de un cáncer, y tras una prolongada y destacada carrera en el mundo del cine, el teatro y la televisión que se remonta a inicios de los años 70.
Puede que su nombre no les diga mucho, pero su rostro les remitirá a uno de los secundarios y villanos más interesantes del cine de las últimas cinco décadas.
Su trayectoria arrancó ligada a la de uno de los últimos grandes maestros de Hollywood, Sam Peckinpah, junto al que trabajó en Perros de paja, La balada de Cable Hogue y La cruz de hierro, aunque en los 70 también participó en otro gran éxito, La profecía. Entre otros villanos de Warner de gran recuerdo se encuentran el Jack El Destripador de Los pasajeros del tiempo y el del guardaespaldas de Billy Zane en Titanic, que se encargaba de amargar el viaje a Leonardo Di Caprio.
Según apuntan desde Efe, "durante los últimos 18 meses se enfrentó a su diagnóstico con su característica elegancia y dignidad", explicaron sus allegados en la nota. Recordaron que, durante 60 años de carrera, Warner ha sido un actor de "cine, teatro, voz radiofónica y televisión muy respetado", hasta su último papel para la gran pantalla como el Almirante Bloom en "El regreso de Mary Poppins" (2018).
"Será muy añorado por su familia y sus amigos, y recordado como un hombre, compañero y padre de gran corazón, generoso y compasivo, cuyo legado de trabajo extraordinario ha emocionado a tantos durante tantos años", agregó el comunicado.