Así pues, la reducción del saldo pendiente bancario no sólo no es una buena noticia en este caso sino la constatación de la falta de confianza de las entidades financieras en nuestro Ayuntamiento. Cuando este Equipo de Gobierno se hizo cargo del Ayuntamiento la deuda bancaria estaba garantizada por los ingresos del Patronato de Recaudación que detraían mensualmente su importe de las cantidades a abonar en Tesorería. Como consecuencia de estos pagos y de la imposibilidad de contratar operación de crédito alguna es por lo que el saldo se ha visto disminuido en la cantidad anunciada. Esto no quiere decir que haya ocurrido lo mismo con el cómputo global de la deuda que, por el contrario, tal como se puso de manifiesto en el Informe de Liquidación del Presupuesto de 2009 que se sometió en Febrero al Pleno de la Corporación, el déficit real superaba los 65 millones de euros, en contra de lo que apuntaba el propio informe al ponerse de manifiesto un error de más de 20 millones en la confección del mismo. En el citado Pleno se estableció la obligatoriedad de la modificación del Decreto de aprobación de la liquidación presupuestaria que a estas alturas no está confirmado se haya efectuado por la alcaldía.
En el informe de la interventora, además de las propias cifras, se ponían de manifiesto numerosas irregularidades contables en el funcionamiento y tramitación de las facturas por parte de las distintas delegaciones, en su mayor parte por carecer de amparo presupuestario y formalizarse a través de expedientes extrajudiciales de crédito. En otro de los apartados del informe la interventora reconoce la existencia de 18,7 millones de euros en facturas pendientes de contabilizar procedentes del ejercicio 2009 y anteriores. A este respecto, señala que tiene conocimiento de que determinadas concejalías guardarían en su poder facturas pendientes, incluso, de registrar en el Registro General de Facturación. El pasado año habría solicitado a las distintas delegaciones todo tipo de documentación relativa a derechos, compromisos de gasto, subvenciones o cualquier otro tipo de documentación de la que no existiera constancia en Intervención y sólo cuatro de ellas habían hecho llegar la información.
Urbanismo, rizando el rizo del secretismo desestimó su envío "por no ser de su competencia". En relación a los Proyectos de Gasto, existen, curiosamente, excesos de financiación en 11 de las obras de caminos rurales financiados con Contribuciones Especiales por lo que, tras la oportuna comprobación, es más que probable que gran parte de los 625 mil euros que componen la partida hayan de ser devueltos a los vecinos sin que, a pesar de haberse puesto de manifiesto en 2.008, se hayan iniciado actuaciones en este sentido. De igual manera existe una desviación de 3,5 millones de euros en cuotas de urbanización cuyo cobro debiera destinarse a la ejecución de obras para las cuales se han cobrado las citadas cuotas de los promotores.
La no rectificación de la liquidación presupuestaria podría resultar de especial gravedad en el caso de que, tal como ha venido apareciendo en los medios, se haya utilizado como base para la solicitud de un crédito a largo plazo que garantizara la liquidez del Ayuntamiento hasta las próximas elecciones, al estar analizando los bancos cifras que no se ajustan a la realidad, al menos con lo aprobado por el Pleno.