El consejero de Presidencia, Antonio Sanz, garantizó el martes pasado, durante la presentación de los Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2025, que el Gobierno de Juanma Moreno garantiza la financiación para dar inicio al nuevo hospital para Cádiz, en las mismas condiciones que las infraestructuras en Jaén y Málaga, con una partida conjunta que no cuantificó en su comparecencia ante los medios de comunicación.
Cuestionado al respecto, apuntó que “podríamos pintar 30 millones” pero remarcó que lo verdaderamente importante era el compromiso de la Administración autonómica con un proyecto demandado desde hace años que requiere, no obstante, más que voluntad política, dado que el impulso al centro hospitalario está condicionado, como reconoció el propio consejero, a contar con el suelo disponible para la construcción. De hecho, la Junta de Andalucía asume que solo dispondrá de recursos económico el próximo ejercicio si es necesario porque todo depende de que el Ayuntamiento de Cádiz adquiera los terrenos de la antigua CASA, propiedad de la Zona Franca.
Las negociaciones entre ambas administraciones, iniciadas hace casi un año, están en punto muerto. No hay avances significativos desde que el Consorcio dijera no a la fórmula planteada por el primer edil, división en tres de la parcela para que, en 1.000 cuadrados se levanten unas 200 viviendas públicas, en 20.450, el hospital, y Zona Franca pueda comercializar los 2.000 metros restantes.
Los números no salen y, aunque el papel lo aguanta todo, existen reparos técnicos para una compleja operación urbanística que compromete al Consorcio y obligaría a llevar a cabo una larga tramitación que podría alargarse durante años.
Sobre la mesa de negociación planea la posibilidad de volver al punto de partida, con la compra por parte de la Junta de Andalucía de la superficie o la compensación con suelos industriales pertenecientes a la Administración autonómica hasta alcanzar el valor del terreno, que podría alcanzar los 19 millones de euros.
El Gobierno de Juanma Moreno no va a dar marcha atrás a la decisión revelada sorpresivamente por la ya ex consejera de Salud Catalina García en Cádiz en mayo pasado, cediendo al Ayuntamiento la responsabilidad de sacar del atolladero un proyecto que cuenta con plan funcional y el interés de las partes involucradas, pero ni siquiera tiene definido el presupuesto, que oscilaría entre los 300 y los 500 millones de euros, según cifre Junta o PSOE.
