La posibilidad de que el Parlament de Cataluña haga una declaración unilateral de independencia ha encendido las alarmas de las grandes empresas catalanas y ya son diversas cotizadas, entre ellas Banco Sabadell, las que han anunciado que trasladan su sede fuera de la comunidad.
La incertidumbre e inseguridad jurídica que ha provocado la deriva soberanista en Cataluña ha llevado a algunas importantes empresas a mover ficha y a cambiar la ubicación de su sede fiscal para garantizar que seguirán estando bajo el paraguas de la Unión Europea en caso de que el Parlamento catalán declare la secesión.
Sólo esta semana, al menos cuatro empresas, tres de ellas cotizadas, han comunicado oficialmente que se llevan su sede fuera de Cataluña.
Banco Sabadell, uno de los principales bancos españoles, ha celebrado hoy un consejo extraordinario de administración para aprobar el cambio de sede social para poder seguir operando con normalidad dentro del Eurosistema, garantizando los intereses de sus accionistas, clientes y empleados dentro de cualquier escenario.
Banco Sabadell ha decidido ubicar su sede fiscal en Alicante, después de 130 años de historia en Cataluña.
CaixaBank, además, prevé celebrar mañana un consejo de administración para debatir una decisión en el mismo sentido.
El pasado martes fue la empresa biotecnológica Oryzon la que anunció que trasladaba su domicilio social de Cornellà de Llobregat (Barcelona) a Madrid para "optimizar sus operaciones y la relación con sus inversores", decisión que hacía pública dos días después del referéndum ilegal del 1 de octubre.
La empresa de telecomunicaciones Eurona, que cotiza en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), también ha anunciado hoy que trasladará su sede de Barcelona a Madrid, una decisión que la empresa ha circunscrito a una estrategia de crecimiento y reorganización interna, y que ha desvinculado de la situación política catalana.
Otra empresa que ha comunicado esta semana que se va de Cataluña es Proclinic Expert, dedicada a la distribución de productos odontológicos, que trasladará su sede social de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona) a Zaragoza, donde ya dispone de un importante centro logístico.
Banco Sabadell, CaixaBank, Eurona, Oryzon o Proclinic son las últimas empresas que han anunciado su intención de llevarse su domicilio social fuera de Cataluña, pero no las únicas: meses atrás ya lo habían hecho otras como Naturhouse, también cotizada, o Derby Hotels.
Asimismo, el empresario catalán Pau Guardans ha trasladado de Barcelona a Madrid el domicilio social de algunas de sus sociedades.
Otras importantes compañías, como Pronovias o Planeta, amenazaron hace tiempo con irse de Cataluña si ésta declaraba la independencia, mientras que la aseguradora Catalana Occidente o las familias propietarias de las farmacéuticas Almirall e Indukern han expresado su preocupación por este eventual escenario.
De hecho, las organizaciones patronales catalanas han reconocido que hay empresas que tienen planes B ante una eventual declaración unilateral de independencia y que han abierto segundas delegaciones fuera de Cataluña o que incluso han separado una parte del negocio, creando otra compañía con sede en otro punto.