Acobiomol era un compuesto que se dispensaba a enfermos terminales, deshauciados por la Seguridad Social y que, supuestamente, curaba enfermedades como el cáncer, el sida o la dermatitis tópica. Dicha sustancia era vendida a cambio de sumas millonarias a los enfermos y a sus familiares por J. M. A. y los hermanos A., quienes decían ser médicos y biólogos.
El hecho salió a la luz tras la denuncia del isleño J. P. G, quien perdió a su esposa durante el tratamiento del citado producto y a cuya querella se unieron diversos perjudicados procedentes de distintos lugares de la provincia de Cádiz (San Fernando, El Puerto de Santa María, Puerto Real y Trebujena). Junto con los anteriores, están imputados varios médicos que trabajaban en la Clínica Costa Oeste de El Puerto.
Al juicio acudirá en calidad de testigo Enrique Moresco, alcalde de la citada localidad, quien tuvo contacto con los supuestos estafadores del Acobiomol por enfermedad de un familiar.
Antecedentes
El Juzgado de Instrucción Número 3 de Jerez tenía pendiente, a fecha 20 de abril de 2005, seis querellas y una denuncia por el caso de la venta en diversos puntos de la provincia de Acobiomol, un producto ‘milagro’ que, según sus creadores, curaba el cáncer y el sida y por el que, además un supuesto biólogo molecular, Juan M. A, y un físico, L. A, ingresaron en noviembre de 2004 en la prisión de Puerto II acusados de cuatro delitos: intrusismo laboral, estafa, contra la salud pública e injurias. Se enfrentan a penas de más de diez años un querellado más y dos médicos que supuestamente colaboraron con ellos.
El juicio se ha dilatado tanto en el tiempo porque durante estos años se ha estado investigando y recabando pruebas e informes médicos de todo tipo para un conocimiento real y correcto de cara a un juicio que ya tiene fecha.
Los hechos saltaron a la luz pública en 2004, a raíz del fallecimiento de una mujer en San Fernando que se había puesto en manos de los dos ingresados en Puerto II, J. M. A. y L. A. para curarse de un cáncer de estómago del que finalmente murió, por lo que su marido, J. P. G, decidió interponer una querella.
No obstante, hasta abril de 2005, fueron seis las querellas presentadas ante el juzgado, más una denuncia que los afectados llevaron directamente al Ministerio Fiscal. De hecho, tras el caso de San Fernando, fueron más familias de municipios como Jerez, El Puerto, Puerto Real y Chiclana las que denunciaron que habían llegado a pagar hasta 4.500 euros por la compra del supuesto fármaco.
El Acobiomol no se encuentra registrado en la Agencia Nacional de Medicamentos y aunque el 22 de octubre de 2004 la Delegación Provincial de Salud de la Junta de Andalucía en Cádiz realizó una inspección de oficio de los dos locales, en San Fernando y Jerez, donde presuntamente se pudo haber comercializado, no se encontró ningún indicio, ni rastro del citado producto o de su uso comercial. Los implicados en el caso están acusados de tres presuntos delitos: estafa, intrusismo profesional y contra la salud pública, por lo que podrían ser condenados a más de diez años.
