El Camp Nou será la sede de la final de la Copa del Rey entre el Barcelona y el Athletic Club de Bilbao el próximo 30 de mayo, según anunció Antonio Suárez Santana, presidente de competiciones organizadas por la Real Federación Española de Fútbol, tras la Junta Directiva celebrada en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
El estadio del FC Barcelona se impuso en la segunda y última votación a San Mamés por 26 a 18 votos.
Las otras dos sedes que se barajaron para la final de la Copa del Rey y que quedaron descartadas en la primera votación fueron Sevilla y Valencia, que cayeron en la primera ronda por 27 votos a 17, con uno en blanco.
A esa votación en la Junta Directiva de la RFEF se llegó después de que en la primera reunión, que duró unas dos horas, entre el Barcelona y el Athletic Club de Bilbao, no se llegara a un acuerdo en sus respectivas peticiones.
El estadio que ambos clubes querían, el Santiago Bernabéu, no pudo ser motivo de elección debido a la negativa del Real Madrid a cederlo, según dijo Joan Gaspart, vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol, tras salir de la Junta Directiva.
Por parte del Barcelona acudieron a la reunión Albert Soler, director de Relaciones Institucionales Deportivas, y Javier Bordas, directivo del conjunto catalán, mientras que del Athletic Club de Bilbao participaron Josu Urrutia, presidente en funciones del club, y Jon Berasategi, director general.
Los cuatro representantes de la Real Federación Española de Fútbol que se sentaron en la mesa de reuniones fueron Jorge Pérez, secretario general; Esther Gascón, directora general; Antonio Suárez Santana, presidente de la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas y presidente de competiciones organizadas por la RFEF; y Miguel Ángel López, coordinador de partidos de la Federación.
Josep María Bertomeu, presidente del Barcelona, llegó a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas pasadas las cinco de la tarde, una hora después del inicio de esa primera reunión, que estaba prevista para las 16 horas y comenzó diez minutos tarde.
La opción sevillana, que pasaba por ser el bético estadio Benito Villamarín, perdió sus opciones ante la dificultad de obtener plazas hoteleras para los aficionados de ambos clubes.
Sevilla, que el 30 de mayo celebra la festividad del su patrón San Fernando, acogerá del 28 al 30 de mayo el "19 Congreso Nacional SEIMC-Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica" y los hoteles ya están prácticamente ocupados por los congresistas.
Mestalla, por su parte, no era de buen recuerdo para el barcelonismo ya que en este estadio perdió las dos últimas finales disputadas allí: 2010-11 y 2013-14; ambas ante el Real Madrid.
Se tratará de la decimoctava ocasión en que la ciudad del Barcelona acoja una final de la Copa de España (Copa del Rey, del Presidente de la República, del Generalísimo), y es la cuarta en el Camp Nou.
Otras cinco finales se jugaron en anteriores estadios propiedad del Barcelona: la Escopidora, en cuatro oportunidades; y Les Corts, en una. La nueves restantes fueron en el estadio Lluís Companys -Montjuic-.
La última ocasión en que el Camp Nou albergó la final de la Copa del Rey fue en la campaña 2009-10, con triunfo del Sevilla sobre el Atlético de Madrid, por 2-0.