Las autoridades deportivas locales felicitaron a los que regresaron al país, a quienes agradecieron haberse mantenido "fieles"
La selección cubana de béisbol que logró el cuarto lugar en la III Copa del Mundo sub-23 disputada en México regresó este lunes a La Habana con solo la mitad de los integrantes del equipo, después de que doce jugadores se fugaran durante el torneo.
De los 24 beisbolistas que componían el conjunto cubano sub-23, la mitad abandonaron la concentración, lo que supone la mayor deserción colectiva de un equipo deportivo cubano en los últimos tiempos.
Las autoridades deportivas locales felicitaron a los que regresaron al país, a quienes agradecieron haberse mantenido "fieles", según un tuit de la Federación de Béisbol de Cuba.
"Nos enorgullece la actitud que ustedes mantuvieron", declaró, por su parte, el vicepresidente primero del Instituto Nacional de Deportes (Inder), Raúl Fornés, al recibir a la delegación.
El directivo del Inder dijo a los peloteros que "a pesar de las dificultades enfrentadas, de las muchas presiones y del juego sucio de que fueron centro, supieron levantar la bandera y luchar con garra".
Una declaración de la representación isleña publicada en el portal deportivo Jit denuncia "la actividad de los traficantes que contaminaron los escenarios de la competencia" y afirma que tiene sustento directo en la anulación del acuerdo firmado por la Federación Cubana de Béisbol (FCB) con las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) en 2018.
Asimismo, sostiene que la cancelación de ese pacto "cierra las puertas a la inserción segura y ordenada" de los beisbolistas de la isla en ese circuito, y considera que los condiciona a pasar por "un trato humillante y discriminatorio" que implica renunciar a su nacionalidad y correr riesgos para sus vidas.
Este éxodo de peloteros ha sido el mayor de un equipo cubano en el extranjero.
Las autoridades deportivas de Cuba condenaron las deserciones y culparon al Gobierno de Estados Unidos de las mismas, así como de instar a los deportistas a dejar el país para convertirse en profesionales y fichar en las Major League Baseball (Grandes Ligas de EEUU).
El acuerdo entre la FCB y las MLB se negoció durante tres años y buscaba ofrecer una vía "segura" a los peloteros de la isla para que pudieran insertarse bajo contratos en los 30 equipos profesionales estadounidenses, sin perder la residencia en su país de origen.
Ese acuerdo que se concretó durante el gobierno del presidente estadounidense Barack Obama (2009-2017) fue visto con beneplácito y como la manera de poner fin al continuo éxodo de jóvenes talentos del béisbol cubano.
Pero tras su llegada a la Casa Blanca, la administración del ex gobernante Donald Trump (2017-2021) decidió anular el pacto.
En junio pasado, se registraron otras deserciones del béisbol de la isla, las del lanzador Lázaro Blanco y el segunda base César Prieto, participantes en el torneo Preolímpico de las Américas disputado en estadios de Florida (EE.UU.)