“Hemos celebrado otra reunión con mediación suiza. El resultado ha sido la decisión de reabrir la frontera”, aseguró ayer Ninó Kalandadze, viceministra de Exteriores georgiana, según la televisión local.
El punto fronterizo que se reabrirá, el único entre ambos países que no pasa por territorio suroseta, será el que enlaza los puestos georgiano de Kazbegi y el ruso de Verjny Lars.
Según la prensa georgiana, el acuerdo será firmado en las próximas semanas y la ceremonia de reapertura podría producirse en marzo próximo.
“Hay un acuerdo verbal de que no sólo el tránsito de mercancías, sino que ciudadanos georgianos también podrán cruzar la frontera en ese punto”, agregó Ninó Kalandadze.