El proyecto de ley animal que excluye del texto a los perros de caza volverá al Congreso de los Diputados para su ratificación final por varias enmiendas aprobadas en el pleno del Senado después de rechazar los cuatro vetos presentados por PP, PNV, Vox y UPN, los dos primeros por un solo voto para la mayoría absoluta.
Entre las enmiendas aprobadas al proyecto de ley de bienestar animal figuran dos de Junts per Catalunya, para evitar que la prohibición del uso de animales de forma ambulante pueda derivar en sanciones discrecionales a personas sin hogar que viven con sus animales y otra sobre colonias felinas así como cinco del PNV en su mayoría por tema competencial.
Junto a esa iniciativa se tramita en paralelo el proyecto de ley de reforma del Código Penal sobre maltrato animal al que se habían presentado dos vetos de UPN y PP que también han sido rechazados; el del grupo popular ha fracasado también por mínimos y tras incorporarse al texto del proyecto de ley ocho enmiendas parciales de Más Madrid, Mes per Mallorca, Junts per Catalunya y ERC volverá asimismo al Congreso para su ratificación final.
En su intervención, la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, impulsora de esta normativa, ha dicho que arranca un nuevo camino para acabar con "la impunidad de los maltratadores" y para acompañar desde las instituciones a esas personas anónimas y asociaciones que hasta ahora solas han velado por la protección animal.
El proyecto de ley dirigido a animales domésticos y especies silvestres en cautividad deja fuera del texto a los perros de caza, pastoreo, deporte o policía; incluye un listado positivo de animales de compañía permitidos en los hogares, endurece las sanciones hasta 200.000 euros según la gravedad de la infracción y prohíbe la venta y exhibición de perros en las tiendas de mascotas, entre otras novedades.
Exigirá cursos a dueños y mascotas y obligará a tener a los animales identificados; prohibirá utilizar los animales en peleas y mantener de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones, trasteros, patios o vehículos y dejar sin supervisión a toda mascota más de tres días consecutivos; no más de 24 horas seguidas en el caso de la especie canina.
Durante el debate, se han criticado vacíos legales "graves", sanciones desproporcionadas, ambigüedades, incoherencias y falta de presupuesto para tantas obligaciones a dueños, mascotas, comercios y administraciones públicas, y los grupos nacionalistas han criticado además la invasión de competencias autonómicas.
El senador José María Oleaga del PSOE ha pedido a los grupos sumarse al consenso del Gobierno y apoyar esta normativa, porque no se entendería que la izquierda apoyara los vetos de la derecha.
También desde el PSOE, el senador Amaro Huelva ha instado a la derecha a ser "responsable" y dejar de "desinformar", y la senadora María Teresa Macías ha instado a llegar a acuerdos con los grupos para mejorar los textos en el desarrollo legislativo.
Por parte del PP, el senador Pedro Rollán ha calificado de "nueva chapuza" la normativa "ampliamente criticada por juristas y colegios profesionales que no contenta a nadie, pero confronta a todos". "No podemos ser palmeros de un Gobierno confrontado, ni de un texto que no está a la altura porque legislar es algo muy serio", ha añadido.
Desde Vox, Yolanda Merelo ha reprochado "las imposiciones" del Gobierno y ha tildado de "animalistas" estas normas, que atienden a "creencias y no a la ciencia", y además sin consenso de los expertos.
El senador de UPN Alberto Catalán ha calificado de "sesgadas" las normas y ha criticado "la prepotencia del Gobierno y "sus tesis animalistas sin rigor científico, ni jurídico", mientras desde el PNV, Nerea Ahedo ha acusado al Gobierno de "clara invasión competencial".
Miguel Sánchez, de Ciudadanos, ha tildado de "infumable" la normativa y ha criticado al grupo socialista por apoyar una normativa "caprichosa, ideológica y sectárea sin rigor científico y sin dotación económica".
Desde Más Madrid, Pablo Gómez ha acusado de "irresponsables" a los socialistas por "errores de bulto" en la norma y por no sentarse a negociar en el Senado al igual que la senadora de ERC Adelina Escandell, que ha criticado la falta de voluntad para negociar del partido socialista.
Desde Mes per Mallorca, Vicenç Vidal ha dicho que la normativa "no cumple las expectativas" ni para los animalistas ni para el mundo ecologista, y desde Compromís, Carles Mulet ha asegurado que "ley sí, pero no así".
Fabián Chinea, de la Agrupación Socialista Gomera (ASG), ha considerado "un paso atrás" la normativa y Junts per Catalunya la ha tildado de retroceso en muchos casos para la protección animal, además de invadir competencias autonómicas.