El Hospital Infanta Elena ha querido sumarse esta misma mañana a la campaña internacional del ‘Banco Rojo’ en apoyo a las mujeres que han sufrido violencia de género, con la
instalación de un banco representativo en la fachada del edificio principal que, con el lema “En memoria de todas las mujeres asesinadas por quienes decían amarlas”, pretende visibilizar una difícil realidad y recordar, como personas y como profesionales sanitarios en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, su apoyo y su colaboración para acabar con el maltrato. “Un problema muy grave que sufren las mujeres, han destacado los profesionales, pero en el que estamos involucrados todos”.
Se trata de una iniciativa procedente de Italia, que se inició en el año 2016 en la localidad italiana de Perugia y anima a la instalación de estos bancos en las áreas públicas como
espacios de reflexión y denuncia, añadiéndoles un color rojo que los haga más visibles y que simbolice la sangre derramada por tantas mujeres que han sido víctimas de violencia de género. Cada uno de ellos lleva una frase emblemática que ayude a pensar y no confundir nunca el amor con la violencia.
El ‘banco rojo’ del Hospital Infanta Elena, como recordatorio perenne de ese compromiso de sus trabajadores, ha sido inaugurado esta mañana por la dirección del centro hospitalario, en un acto en el que han estado acompañados por trabajadores de diferentes servicios, que han participado en la concentración convocada para el día de hoy, en el que se ha guardado un minuto de silencio y se ha leído un manifiesto en favor de las víctimas y de total y absoluto rechazo contra la violencia.
Durante la concentración, los trabajadores han portado carteles elaborados en el centro, que
ha iluminado su entrada principal con luces lila, el color de la lucha contra la violencia de género, animando a las mujeres a romper la situación de abuso y poniendo de manifiesto su voluntad de escucha y de colaboración, conocedores de que en muchos de los casos, es la institución sanitaria la primera en atender a una mujer en dicha situación.
Los profesionales llevarán durante el día de hoy una
mascarilla lila. Un gesto simbólico que se suma al resto de las actividades organizadas para el día de hoy, que se recogerán también en las redes sociales del centro hospitalario (@InfantaElenaH), con las que se ha querido visibilizar el problema y, sobre todo, poner de manifiesto el compromiso de todos, de forma colectiva e individual, en esta lucha contra la eliminación de la violencia contra la mujer.
Esta iniciativa forma parte de las medidas tomadas por la Comisión de Violencia de Género del Hospital Infanta Elena, formada por profesionales de distintas categorías y servicios que trabaja durante todo el año en incorporar medidas y protocolos que mejoren la atención que se presta a las víctimas, coordinando también la formación de los profesionales sobre este ámbito y tratando de mejorar todos aquellos aspectos relacionados con la prevención y la asistencia desde el entorno social y sanitario. La comisión trabaja también de manera conjunta y coordinada con todas las instituciones relacionadas con las mujeres en situación de riesgo por violencia.
Precisamente en la reunión extraordinaria mantenida esta misma mañana, se ha aprobado la adscripción del Hospital al programa de
acreditación para ‘Centros comprometidos contra la violencia de género’. Una iniciativa impulsada por la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Familias, con el objetivo de formar una red de centros especializados en la atención integral a mujeres víctimas de violencia de género.
Un proceso de acreditación por parte de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía, que incluye numerosas medidas y buenas prácticas a implantar en el campo del abordaje de la violencia de género. Este distintivo reconoce el compromiso del Hospital en este ámbito y permite que las mujeres puedan identificarlos como entornos seguros y especializados en este tipo de violencia.
Las medidas incluidas abordan diferentes aspectos relacionados con la asistencia y la gestión de los centros, tales como la formación de los profesionales, los sistemas de detección, intervención y seguimiento de casos, la coordinación con los equipos de atención individualizadas y las otras administraciones, así como la sensibilización, la prevención y el trabajo comunitario.
El programa cuenta con la financiación de la Secretaría de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género del Ministerio de Igualdad, en el marco del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, y constituye el primer ejemplo de la puesta en marcha de un sistema acreditativo de centros contra la violencia de género, identificando aquellos centros públicos o privados, educativos, sanitarios o de cualquier otro ámbito, en los que se dé especial importancia a la prevención y detección de la violencia de género.