Lo que iban a ser tres meses se van a convertir en casi el doble. Los problemas con varias fugas en las conducciones de agua van a retrasar el final de las obras de remodelación de la céntrica calle Los Álamos hasta el próximo mes de julio. Los comerciantes han mostrado mucha inquietud por la lentitud de los trabajos y por los efectos en sus negocios.   Los trabajos comenzaron a principios de febrero y, en sus inicios, se esperaba tenerla lista para Semana Santa. Sin embargo, dos fugas “muy importantes” localizadas en las conducciones de agua han retrasado los trabajos, según explica el concejal de Urbanismo, Javier Márquez, quien insiste en que aún quedan otros dos meses para abrir al tráfico y finalizar todos los trabajos. Un mes para concluir la colocación de los adoquines y el embaldosado de las aceras y otro para dejar fraguar el pavimento y evitar hundimientos.   Desde el Ayuntamiento están “muy contentos” con la ejecución de la obra que está llevando a cabo la empresa, cuyas primeras certificaciones ya han sido tramitadas por la Concejalía de Hacienda para que sean abonadas a finales de este mes. Márquez confirma que no se ha paralizado la obra mientras se paga ese dinero, pese a las quejas por la bajada de la actividad.   Muchas quejas Al otro lado se encuentran los comerciantes de esta céntrica zona, que se han cansado de esperar tras más de tres meses sufriendo los trabajos. Alertan de los problemas que está causando la obra a sus negocios y de la lentitud en su ejecución. Alfonso Oña, propietario de la Marquetería Los Álamos, denuncia el efecto que está teniendo en sus ventas. “Los comercios que tenemos las aceras levantadas no tenemos ni un solo cliente”, destaca.   El Ayuntamiento comenzó a finales de enero las obras de adecuación integral de la calle Álamos y la plaza de San Francisco, con una inversión de más de 165.000 euros. Acarreó el corte del tráfico en esta arteria del casco antiguo.