La renuncia de Pérez Pelayo se produce en un momento de plena crisis interna del partido, que se vio acrecentada por la salida de Tomás Herrera y por el fracaso electoral de Rafael España.
Ahora, la elección del candidato por Cádiz a las elecciones del 20-N han encendido la mecha del cisma que se escenifica con la dimisión de un histórico y ligado a la línea de Rafael España.