La Guardia Civil de Jerez ha detenido al jefe de turno y a un ayudante de la fábrica de cemento de Holcim en Jerez tras haberlos sorprendido cuando intentaban, presuntamente, quedarse con parte de los 18 kilos de cocaína que iba a ser destruida -por orden de un juez- en el horno de la mencionada cementera.
Según confirman a este periódico fuentes de la investigación, la detención de estas dos personas se produjo el pasado viernes cuando efectivos de la Guardia Civil procedían, con la ayuda de estos dos trabajadores, a introducir la droga en la chimenea por la que se arrojan los materiales que caen al horno de esta factoría jerezana.
Fue en ese momento cuando los agentes de la Guardia Civil sorprendieron al jefe de turno -de unos treinta años aproximadamente y que lleva una década trabajando en estas instalaciones-, y a su ayudante, manipulando la droga en cuestión en uno de los niveles del torno donde se estaba acometiendo esta actuación.
Tras percatarse de lo ocurrido y pillarles in fraganti, los agentes de la Benemérita identificaron a los dos trabajadores y se los llevaron detenidos, trasladándolos hasta los calabozos de la Guardia Civil de Jerez, situado en el Paseo de Las Delicias.
A disposición judicial
Las mismas fuentes de la investigación aseguran que estos problemas no son nuevos, sino que desde hace al menos un año se tenía sospechas de que había “incidencias” en los procesos de destrucción de la droga que se acometen en esta cementera jerezana.
Hasta el momento, la investigación de la Guardia Civil por estos hechos continúa abierta, por lo que no se descartan que se produzcan más detenciones en los próximos días. Por su parte, los dos trabajadores arrestados han pasado ya a disposición judicial.
