El Málaga salió al último día del mercado de fichajes en busca de alguien para la parcela ofensiva. Principalmente, se deseaba un extremo, dada cuenta de que el club sólo cuenta ahora mismo para esa posición con Larrubia, Juan Hernández y Kevin como jugadores específicos. No pudo ser y el que terminó llegando fue Manu Molina.
El centrocampista rescindió apenas una semana antes con el Real Zaragoza, equipo con el que disputó 25 partidos la temporada pasada, y se dio la oportunidad de ficharlo. A sus 31 años, se trata de un jugador con buen pie, combinativo y nada exento de buena técnica.
Pese a que dejó claro que prefiere que sea el público el que le defina (“las notas se ponen en mayo”), sí dio un pequeño adelanto de lo que podremos ver de él sobre el césped durante la rueda de prensa de su presentación, que se realizó en el local de un patrocinador del equipo: “Soy un jugador con experiencia en Segunda y Segunda B. Soy jugador de ida y vuelta, me gusta tener el balón, darle sentido al juego. Soy ese tipo de futbolista. No me quema el balón en los pies”.
También dedicó unas bonitas palabras al que ya es su nuevo entrenador, Sergio Pellicer: “Lo conozco de Valencia, Coruña... Nos hemos enfrentado, conozco su estilo. Siempre me han gustado sus equipos, de intensidad, de trabajo, de tener el balón. Ahora me toca ponerme a tope”.
Se trata de un futbolista experimentado en la categoría. Ha jugado en ella en equipos como Recreativo de Huelva, Valencia Mestalla, Lleida, Salamanca, Linense o Ibiza. Todo este bagaje le sirve, no obstante, para dejar claro que el nivel es superior a antaño: “Esta Liga está mucho más cercana al fútbol profesional. Es un plus más. La Primera RFEF ahora no es como la antigua. Los campos también han cambiado, eso ayuda a jugar”.
Otra de las preguntas obligadas era si le daba miedo la palabra ascenso, esa que tanto se ha intentado evitar por parte del club a lo largo del verano. Molina ha dejado claro que “no me da miedo”, aunque ha matizado: “No se asciende en la jornada 5 ni en la 32. Tenemos que ir poco a poco. No vamos a ascender en Baleares el domingo. Hay que llegar a mayo en condiciones de luchar por lo que queremos”.
El hecho de haber entrenado con el Zaragoza hasta hace escasamente una semana le ha hecho llegar en buenas condiciones físicas, por lo que asegura que está “disponible” para jugar este mismo domingo ante el Atlético Baleares.
Manu Molina cierra de este modo un intenso mercado de fichajes que ha contado con la llegada de once jugadores y la sensación de que se podría reforzar aún más en invierno.
