La Consejería de Fomento y Vivienda ha comenzado a ejecutar el túnel bajo el lecho del río Guadalmedina para el paso del metro de Málaga, una vez que se dispone de la maquinaria utilizada en la Alameda Principal.
Toda la maquinaria pesada y plantas industriales instaladas en la Alameda Principal, donde se han terminado los últimos muros pantallas del túnel a excepción de las zonas afectadas por la intervención arqueológica y por la reposición del colector de Carretería, se ha trasladado al recinto de obra del puente de Tetuán. Esto ha permitido desplazar la obra pesada y de mayor afección del ámbito de la Alameda, donde se localizan más viviendas y comercios.
El túnel que construye la Unión Temporal de Empresas (UTE) Atarazanas, encargada del tramo Guadalmedina-Atarazanas del suburbano, se llevará a cabo con la misma técnica utilizada bajo la Alameda Principal, mediante la ejecución de pantallas y la excavación del túnel en su interior.
Previamente, se ha demolido el tablero norte y la cimentación singular del puente de Tetuán, y se ha desviado el cauce del río con la construcción de una plataforma de trabajo que, además, tiene suficiente altura como para cumplir con la función de salvaguarda del cauce subterráneo del río.
Con la demolición de todos los elementos de alzado del puente --estribos y pilas--, así como de la cimentación singular de esta estructura mediante la extracción de 67 pilotes metálicos hincados a 13 metros de profundidad, la zona para la ejecución del túnel bajo el río queda despejada.
El túnel bajo el río Guadalmedina tiene, según la Junta, una ventaja con respecto al túnel de la Alameda Principal, ya que tiene menos profundidad y menos volumen de excavación al no albergar el futuro espacio para el Cercanías.
Sin embargo, tiene la complicación del cauce subterráneo del río, que puede incidir en el aumento del nivel de lodos en la excavación y, por tanto, en la estabilidad de las paredes del túnel.
Al situarse las pantallas en el río, es posible que las corrientes subterráneas de agua provoquen el aumento del nivel de lodos. La plataforma de trabajo de 1,5 metros de altura aproximadamente permitirá compensar la presión del agua del lecho del río y, por tanto, garantiza la ejecución de las obras.
El metro de Málaga, infraestructura que ejecuta la Junta de Andalucía, se puso en servicio comercial el pasado 30 de julio de 2014, con las líneas 1 y 2 hasta el intercambiador de El Perchel, equivalente al 81 por ciento de la infraestructura.
Actualmente se trabaja en la planificación y ejecución del 19 por ciento restante de la red, conformada por los tramos entre El Perchel y Guadalmedina, Guadalmedina-Atarazanas y la prolongación hasta el Hospital Civil, que configuran una red total de 14,8 kilómetros de trazado con 23 estaciones y paradas.