En total, Brasil acumula 615.179 fallecidos y 22.118.782 contagios desde que el coronavirus llegó al país, en febrero de 2020, según el último balance divulgado
Brasil reportó 215 muertes por la covid-19 en las últimas 24 horas y superó las 615.000 víctimas fatales por el virus, en momentos en que los casos con la nueva variante ómicron aumentan en el país, informó este jueves el Gobierno.
En cuanto a los contagios, el gigante suramericano reportó 12.910 positivos en la última jornada, entre los cuales, dos nuevos casos de ómicron en Brasilia, que se suman a los tres confirmados ayer en Sao Paulo, los primeros en América Latina. Otros ocho casos sospechosos con la nueva variante están siendo analizados.
En total, Brasil acumula 615.179 fallecidos y 22.118.782 contagios desde que el coronavirus llegó al país, en febrero de 2020, según el último balance divulgado hoy por el Ministerio de Salud.
De acuerdo con los datos, del total de positivos con el SARS-CoV-2 confirmados en el país se han recuperado 21.351.505 pacientes, lo que equivale al 96,5 % de los contagiados, mientras que otros 152.098 casos aún continúan bajo observación de las autoridades sanitarias.
La cifras confirman a Brasil como el segundo país del mundo con mayor número de muertes por la covid-19, después de Estados Unidos, y el tercero en cantidad de contagios, detrás de el país norteamericano e India.
No obstante, los números de la pandemia continúan a la baja en el país, una caída que tanto los expertos como las autoridades sanitarias han atribuido a los avances en la campaña de vacunación contra la covid-19.
Los datos de la cartera de Salud señalan que en esta nación de más de 213 millones de habitantes, más del 74 % de la población ya recibió la primera dosis de la vacuna y más de un 65 % ya cuenta con el ciclo completo de inmunización.
Pese a que los casos con la ómicron prácticamente se duplicaron en menos de 24 horas, el Gobierno de Jair Bolsonaro se niega a exigir el certificado de vacunación de todos los viajeros que desembarquen en el país y a imponer restricciones en puertos y aeropuertos.