El candidato del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha proclamado su victoria en las elecciones presidenciales que se han celebrado este domingo subrayando que se trata de la "victoria del pueblo" en "homenaje" al difunto presidente Hugo Chávez.

   En un discurso de unos 40 minutos que ha pronunciado muy poco después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunciara su victoria con el 50,67 por ciento de los votos, desde el balcón del Palacio de Miraflores, Maduro ha indicado que se trata de "un triunfo electoral justo, legal y constitucional".

   El aspirante oficialista ha subrayado que estos resultados electorales significan que Chávez sigue "invicto". "Es la primera vez que el gigante no es candidato, pero dejó a su hijo y su hijo va a ser presidente para construir patria", ha dicho.

   Maduro ha destacado que se trata de una "victoria trabajada, luchada". "Hemos hecho un gran esfuerzo recorriendo cada palmo de esta tierra bolivariana, un esfuerzo humano, físico y moral, con el dolor en el pecho por la pérdida del comandante", ha explicado.

   Además, ha insistido en que, desde la muerte de Chávez, el Gobierno ha tenido que enfrentarse "a varias guerras como la guerra eléctrica --ya denunciamos que querían apagar este país--, la económica y la psicológica".

   El presidente electo ha revelado que ha hablado con el candidato de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles, media hora antes de que el CNE anunciara los resultados electorales, y que el líder opositor le ha propuesto "un pacto".

   "Yo decidí escucharlo porque somos hombres democráticos y podemos hablar con quien sea. Conversamos. Él me transmitió su visión y yo le transmití la verdad. Le dije: 'Hay unos resultados y tú sabes cuáles son", ha relatado.

   El candidato del PSUV ha indicado que ha instado a su rival en las urnas a reconocer los resultados electorales. "Él me dijo que iba a pensarlo", ha señalado y, en contraposición ha sostenido: "Tengan la seguridad de que si el CNE hubiera dicho que ganó otro candidato aunque solo fuera por un voto yo estaría aquí reconociéndolo".

   Así, se ha comprometido a respetar a los venezolanos que han votado por él y a los que lo han hecho por Capriles. "Porque esta Constitución escrita de nuestro puño y letra costó mucho y nosotros somos sus garantes", ha argumentado.

AUDITORÍA

   Maduro ha solicitado formalmente al CNE que realice una auditoría de los votos emitidos para confirmar los resultados electorales, disipando las dudas de la oposición, y garantizar con ello la paz y estabilidad del país.   

   "Si quieren hacer una auditoría, bienvenida sea, aunque ya estaba estipulado que se hiciera una del 54 por ciento de los votos emitidos. Los primeros interesados somos nosotros, así que yo se lo pido formalmente al CNE", ha dicho.

   No obstante, a lo largo del discurso ha sido informado de que el rector del CNE Vicente Díaz, vinculado a la MUD, ha solicitado una auditoría sobre el cien por cien de los votos emitidos, y ha aceptado. "Que las cajas hablen, no tenemos miedo", ha contestado.

LLAMAMIENTO A LA PAZ

   Consciente de que se trata de una victoria electoral muy ajustada --con 102.338 de diferencia--, Maduro ha subrayado su legitimidad, recordando que el propio Capriles salió reelegido como gobernador del estado de Miranda con apenas dos puntos porcentuales de margen.

   "Hemos tenido una mayoría clara", ha insistido. "Un presidente, de otro país que no voy a nombrar, ganó por el 0,3 por ciento y gobernó por ocho años", ha dicho en alusión al estadounidense George W. Bush. "En México, (Felipe Calderón) ganó con el 0,6 por ciento y gobernó seis años 'completicos'", ha añadido.

   Así, ha llamado a la paz "a todo el pueblo venezolano". "Que nadie caiga en provocaciones. Paz, paz y paz", ha dicho una y otra vez el ya presidente electo.

   En la misma línea, se ha dirigido a la oposición. "En nombre del Cristo Redentor, con el espíritu de mi comandante, hago este llamamiento para que sepan administrar el resultado que han obtenido con humildad, sin llamar a la violencia", ha instado, mientras sostenía una imagen de Chávez.

GOLPE DE ESTADO

   Maduro ha advertido de que existe una "operación internacional para atacar la democracia venezolana". "Pero nosotros somos fuertes y preservaremos la democracia, la soberanía y la paz. No habrá chantaje de nadie", ha sostenido.

   El candidato del PSUV ha restado importancia a las amenazas, al considerar que "no tienen con qué dar un golpe de Estado", aunque ha subrayado que, si lo intentan, el Gobierno responderá con la Constitución. "Sabremos que hacer si alguien levanta su insolente voz contra el pueblo de Venezuela", ha apuntado.

   A este respecto, se ha hecho eco de las denuncias de algunos medios de comunicación, según los cuales "grupos de motorizados están recorriendo los lugares en los que se encuentra la oposición". "Cuidado, no vaya a ser una trampa", ha alertado.

RECTIFICACIONES

   En relación a su programa de Gobierno, ha reiterado que seguirá con la construcción de la patria bolivariana "para proteger el legado de Chávez", aunque "rectificando lo que haya que rectificar".

   "Mañana, la construcción de la patria bolivariana continúa. Entramos en una nueva fase de aceleración, de desarrollo, en una etapa de eficiencia, de poder popular, de honestidad absoluta", ha indicado, al tiempo que ha hecho un llamamiento a la unidad.

   Si bien, ha considerado necesario llevar a cabo "una rectificación profunda y a fondo en todos los órdenes de la vida". "Yo hago un llamado a todos los compañeros para analizar cómo avanzar hacia el futuro, pero con propuestas para no enredarnos en un debate que pueda desgastarnos", ha indicado.