La Corte Internacional de Justicia (CIJ) celebra hoy nuevas audiencias públicas sobre el litigio territorial que enfrenta a Costa Rica y Nicaragua desde 2010 ante el tribunal de La Haya, que serán las últimas antes del fallo.
Las audiencias comenzarán este martes con una primera ronda de argumentos orales que se prolongará hasta el 24 de abril y terminarán con una segunda ronda el 1 de mayo, según el calendario de este tribunal de la ONU.
Durante estas audiencias se escuchará a los expertos citados por ambas partes, comenzando por los de Costa Rica este mismo martes y siguiendo con los de Nicaragua el viernes.
La delegación costarricense estará encabezada por el canciller del país, Manuel González, y la de Nicaragua por su embajador en Holanda y representante ante la corte, Carlos Argüello.
Se trata de las últimas audiencias públicas que celebra la CIJ en el caso antes de comenzar, a partir del 1 de mayo próximo, el plazo para que la corte delibere sobre el caso.
El plazo para las deliberaciones normalmente dura entre cuatro y seis meses, de acuerdo con las fuentes consultadas.
La CIJ tramita desde 2013 en un solo expediente dos demandas entre ambos países centroamericanos.
La primera fue presentada por Costa Rica en 2010, cuando acusó a Nicaragua de una incursión y ocupación militar de un pequeño territorio limítrofe, que ambos países consideran soberano, durante unos trabajos de dragado de un canal realizados por Managua en el fronterizo río San Juan, de soberanía nicaragüense.
La zona se conoce en Costa Rica como isla Portillos y en Nicaragua como Harbor Head.
Según Costa Rica, Managua causó además daños ambientales severos a un humedal protegido por convenios internacionales.
La segunda demanda fue presentada por Nicaragua en 2011 y en ella acusó a Costa Rica de causar daños ambientales al río San Juan durante la construcción de un camino de lastre de 160 kilómetros que corre paralelo al afluente.
La CIJ dictaminó en 2011 medidas provisionales al pedir a las partes abstenerse de cualquier acción que pudiera agravar la disputa y a retirarse de la zona a la espera de una decisión de fondo.
La corte reafirmó en noviembre de 2013 las medidas, e instó además a Nicaragua a poner fin al dragado de dos nuevos caños (canales) en el cauce del fronterizo río San Juan y a retirar de la zona a su personal, como pedía San José.
Un mes después, Managua se llevó un revés, al rechazar la CIJ nuevas medidas provisionales en relación con presuntos daños medioambientales causados por las obras de construcción de una carretera por parte de Costa Rica en la ribera del río San Juan.