El líder norcoreano, Kim Jong-un, inauguró la tercera central hidroeléctrica que el país asiático construye en el último año, situada cerca de su frontera con China y destinada a mejorar su autosuficiencia energética, informó hoy la agencia estatal KCNA.
La central se ubica en un río en la provincia septentrional de Yangang fronteriza con China y próxima al monte Paektu, considerado por el régimen como un "lugar sagrado" donde supuestamente nació el dictador Kim Jong-il, fallecido en diciembre de 2011.
Su sucesor, Kim Jong-un, acudió a la inauguración de la planta acompañado de otros altos cargos del régimen, y destacó que se trata de la tercera central hidroeléctrica que Corea del Norte completa a lo largo de un año, según recoge la agencia estatal norcoreana KCNA, que no precisó la fecha exacta del acto.
El líder norcoreano alabó que la planta haya sido completada cuatro meses antes del plazo previsto, lo que permitirá presentarla al VII Congreso de los Trabajadores, el primero que se celebra en 36 años en Corea del Norte y que tendrá lugar a comienzos de mayo, según la KCNA.
La construcción de la central supone "un duro golpe para los imperialistas estadounidenses y sus seguidores", ya que "anula los efectos de las nuevas sanciones contra Pyongyang" y "refuerza sus principios de auto-abastecimiento y auto-desarrollo", destacó la agencia norcoreana.
Las otras dos nuevas plantas hidroeléctricas también están ubicadas en la zona del norte del país fronteriza con China, y después de que estas empezaran a operar a comienzos del pasado octubre, observadores internacionales señalaron que podrían presentar grietas y fallos en su funcionamiento.
La energía de Corea del Norte proviene principalmente de centrales térmicas de carbón y de plantas hidroeléctricas, y pese a que el país ha incrementado su suministro procedente de éstas últimas con la construcción de nuevas instalaciones en los últimos años, todavía son frecuentes los cortes del suministro eléctrico.
El régimen que lidera Kim Jong-un es objeto de nuevas y más duras sanciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU a raíz de sus últimos ensayos nuclear y de misiles.
Entre ellas se incluyen la inspección obligatoria de cargamentos, restricciones en la exportación de materias primas, embargo del comercio de armas ligeras, prohibición de venta al país de combustible aeroespacial y sanciones financieras sobre individuos, entidades y activos norcoreanos.
