“Adquirimos el compromiso de solventar cuestiones que están liadillas”, comenzó su intervención en el último pleno, celebrado esta semana, el concejal de Urbanismo, Daniel Harillo, para argumentar el nuevo acuerdo que han alcanzado el Ayuntamiento y Eroski de cara a la construcción del famoso centro comercial. Pero el acuerdo, en forma de convenio, si bien pueda desenredar el asunto, lo hace sólo en beneficio de la promotora de la gran superficie, pero contra los intereses del propio Ayuntamiento. Y todo porque, a grandes rasgos, se trata de permitir a los empresarios deshacerse el campo de fútbol, que pasa medio derruido y con un gran agujero a manos del Ayuntamiento, teniendo el Consistorio, para colmo de males, que pagar 3,2 millones de euros por ese baldío solar. Ese es el acuerdo que desenreda la “liadilla” cuestión, curioso en el supuestamente arruinado Consistorio de populares y andalucistas.
El equipo de Gobierno utilizó no pocas artimañas argumentales para esconder este hecho, el más evidente, y resultó que ciertamente no se desembolsarán 3 millones, pero ese dinero sí dejará de entrar en las arcas municipales porque el Ayuntamiento lo bonificará a la promotora de Eroski, la empresa Ronda Gestión de Proyectos Comerciales, en las licencias para construir su centro comercial: “Pagar tres millones o dejar de ingresarlos al fin es lo mismo. Pensamos que perder tres millones para aliviar a una empresa privada es aberrante, más aún cuando han traído ustedes al pleno más recortes e impuestos que afectan a los ciudadanos”, dijo Paqui González, la portavoz de IU, durante su réplica, en un debate que, curiosamente, tenía lugar tras que el equipo de Gobierno defendiera la necesidad de subir la factura del agua. Izquierda Unida, de hecho, votó contra el convenio, y el PSOE se abstuvo, porque “no han celebrado siquiera una comisión de obras para debatir este asunto, que llega al pleno como urgente”, se quejó la portavoz socialista, Teresa Valdenebro.
Y tenía motivos para la queja la oposición, al desvelar, quizá sin quererlo Daniel Harillo, el motivo del convenio, afirmando que el gran Eroski previsto inicialmente “no es viable con la crisis”. Según denunció IU, el hecho demuestra cómo el Ayuntamiento se ha plegado sin más a los intereses de la empresa, que ha logrado colocar de nuevo al Consistorio el antiguo municipal de deportes: “Si quieren hacer un Eroski más pequeño en el recinto ferial, que lo hagan, independientemente de que el Ayuntamiento les compre el campo de fútbol”, lamentó Paqui Ruiz.
LO QUE NO SE DIJO
Harillo durante el pleno no quiso hacer pública esa polémica cantidad de tres millones a pagar por el campo de fútbol. La oposición, por contra, no desaprovechó la oportunidad para insistir en la cifra, que el concejal, en todo caso, sí había adelantado, como ocurre en los últimos tiempos con los asuntos del Urbanismo, mediante una filtración horas antes del pleno a determinados medios de comunicación, para negar después esa información al órgano plenario.
Pero durante la sesión se escondió además lo que la ciudad acabará perdiendo con este negativo convenio. De un lado, el proyecto que Eroski vino a presentar a Ronda suponía una inversión de 120 millones; la licencia de obras previstas inicialmente, según fuentes municipales consultadas por RONDA SEMANAL, ascendería a más de 6 millones de euros. Un menor proyecto supondrá una menor licencia que, como se apuntó antes, será además bonificada a la empresa por la compra del derruido campo de fútbol.
Pero el Ayuntamiento, además, pierde con el convenio las 514 plazas de aparcamiento que iban a serle cedidas, de las 1.500 previstas en el gran proyecto inicial. El Consistorio, según anunció en su día, pensaba venderlas a entre 9.000 y 10.000 euros cada una, alcanzándose en torno a 5 millones. Las plusvalías económicas por las licencias comerciales de un gran Eroski, al fin, no serán ni de lejos las que acabe generando el descafeinado nuevo Eroski.
Parece que, pese a lo que afirmó la alcaldesa durante el pleno, ni gana el Ayuntamiento ni gana la ciudad.
POLÉMICA FIRMA
El propio Partido Popular criticó en su día el anterior convenio entre el Ayuntamiento de Ronda y la empresa Ronda Gestión de Proyectos Comerciales, llegando los concejales del PP a marcharse del pleno celebrado en noviembre de 2010 en que se cambió la titularidad de los terrenos , al entender que existían irregularidades que ahora, justamente, se investigan en el caso Acinipo. Se defendió entonces que los terrenos del antiguo municipal de deportes se habían adjudicado en subasta pública en febrero de 2009 a la promotora Ruiz Jurado, pese a que fue ésta quien propuso el cambio de titularidad. Finalmente, en abril de 2011, el asunto hubo de llevarse de nuevo a pleno al advertir el registrador de la propiedad que no era legal realizar el cambio de inscripción, y finalmente el Consistorio acabó limitándose a autorizar la cesión entre empresas. Pues bien, el PP ahora rubrica el nuevo convenio justamente con Ronda Gestión de Proyectos. Y acepta que Eroski vuelva a su idea inicial en el antiguo recinto ferial.
