Está a punto de finalizar la campaña de recolección del corcho en la Serranía de Ronda 2020, con una producción parecida a la del pasado año con
unas 4.100 t, aproximadamente. La primavera, inusualmente húmeda, ha salvado la campaña.
A pesar de que el producto tiene muy buena calidad esta campaña, el Covid-19, ha tocado también a este sector. Y es que el principal destino del corcho es para tapones de botellas de vino de calidad, y debido a esta pandemia, el consumo tanto a nivel particular como del sector hostelería y restauración ha bajado de forma considerable, repercutiendo negativamente a toda la cadena. Por
este motivo, desde ASAJA Málaga reclamamos compensaciones principalmente fiscales, para compensar esta situación negativa que ha afectado a este sector.
La campaña viene dada por
un otoño irregular en cuanto a precipitaciones y una primavera inusualmente húmeda y lluviosa, junto con un comienzo de verano con temperaturas normales. Los factores condicionantes para la saca son temperatura y humedad. Eso hace que las cuadrillas hayan visto en cierta manera una mejora de su trabajo en la extracción o “saca”.
Los precios en este año están
un 20% más bajo que la pasada campaña, por motivos del
Covid-19, y no se esperan que se recuperen mucho más de esta cifra.
Las principales zonas de producción de la provincia de Málaga están en Cortes de la Frontera, Ronda, en varios municipios de Valle del Genal, como Gaucín, Jubrique, Alpandeire, Farajan, Genalguacil, Algatocín, Benarraba, también en Jimera de Libar, Montejaque, Benaojan, Monda, Istan y Ojen.
A la comarca de la Serranía de Ronda, pertenecen la mayoría de los municipios de la provincia que poseen superficie de alcornoques, siendo Cortes de la Frontera el municipio con mayor superficie. En la Serranía de Ronda el alcornocal, árbol del cual se extrae el corcho, ocupa unas 16.000 hectáreas.