La asociación de amigos del pueblo saharaui de Sanlúcar ‘La Jaima’ realizó la entrega de sus reconocimientos anuales el pasado sábado en un acto celebrado en las bodegas Delgado Zuleta. El primer Teniente de Alcaldesa, Víctor Mora, acompañado por una amplia representación del gobierno municipal, presidió el acto que contó también con la presencia del delegado Saharaui-Frente Polisario en Andalucía, Abidin Bucharaya, la presidenta de la federación andaluza (Fandas), Ángeles Ariza, y la presidenta provincial de asociaciones de amigos del pueblo saharaui, Inmaculada Ruiz.
Los reconocimientos, agrupados en tres categorías, han recaído en Francisco Oliva, a título personal, “por su colaboración con La Jaima y su implicación en la causa saharaui”; Autocares Zambrano S.L., a la entidad. Este reconocimiento lo recogió su propietario, Antonio Zambrano, “por su disponibilidad aún en tiempos difíciles y su trato hacia el colectivo saharaui, así como el del todos sus conductores”. Y, por último, a Manuel Vital, a la persona pública, “por ser el primer alcalde que trajo a Sanlúcar a los primeros niños saharauis, haciendo posible que hoy exista esta asociación”.
El presidente de la asociación, Mouftah Mbarek, acompañado por el presidente de honor de la misma, Carlos Calavia, y el portavoz de la organización, Juan Manuel Gutiérrez, fueron los encargados de entregar estos reconocimientos en un emotivo acto que congregó a un gran número de personas, entre las que se contaban muchas de las familias sanluqueñas que acogen cada año a niños saharauis. Los galardonados coincidieron en destacar en sus agradecimientos el trabajo que lleva a cabo la asociación, así como la solidaridad del pueblo sanluqueño que demuestra cada verano.
Víctor Mora destacó en su intervención, que esta asociación es la que le pone rostro a la causa saharaui en la ciudad, pero que sin las numerosas familias que cada verano acogen a niños saharauis no habría nada, “son familias que aún atravesando por una mala situación económica, no dudan en acoger a una persona más en sus casas y darles las oportunidades que difícilmente podrían obtener de otra forma en su lugar de orígen. Mientras están aquí son sometidos a reconocimientos médicos y se les trata como a un miembro más de la familia, teniendo acceso a una forma de vida que no conocen ni imaginan”. El primer teniente de alcaldesa recordó también que “el Ayuntamiento seguirá colaborando con la asociación dentro de sus posibilidades y atendiendo con nuestro granito de arena a un pueblo amigo y hermano como el Sáhara”.