Hasta siete jugadores del
Sevilla Fútbol Club han abandonado la capital hispalense para sus compromisos internacionales en este parón. A la multitud de ausencias se han sumado también Jesús Navas, cuya retirada es más cierta a cada partido que pasa,
Peque,
Lokonga y
Suso, que causó baja en Butarque.
Sin embargo, no todo han sido bajas sobre el césped de la
Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios.
Tanguy Nianzou y
Loïc Badé han regresado a entrenar con el grupo, tras superar las lesiones que ambos sufrieron frente al
Espanyol en el
RCDE Stadium.
La recuperación de ambos centrales se antoja vital para
García Pimienta, que ha visto cómo se le esfumaba una pareja que estaba funcionando cuando más falta le hacía al equipo continuar con la dinámica positiva.
Marcao quedó muy señalado tras el penalti que provocó frente a la
Real Sociedad y, aunque
Kike y
Gudelj cumplieron con creces en
Butarque, el fallo de
Agoumé hizo que el buen hacer de la zaga sevillista se viera neutralizado.
Además de estas dos recuperaciones, el sevillismo ha podido ver este lunes cómo
Nyland tocaba balón, aunque fuera al margen de sus compañeros.
Álvaro Ferllo consiguió dejar su portería a cero frente a
Espanyol y
Las Rozas, pero no fue capaz de evitar las dos derrotas consecutivas que llevan los blanquirrojos en
LaLiga.
En un momento tenso, un rayo de esperanza se comienza a dibujar en Nervión mientras se vacía la enfermería