En el majestuoso
Alcázar de Sevilla, se celebró la
tradicional entrega de naranjas amargas al
embajador del Reino Unido en España, Alex Elis. Este año se hace entrega de
dos cajas de 40 kilos. Un total de
80 kilos de naranjas amargas que el embajador podrá disfrutar con la
elaboración de mermelada. Y es que este
gesto anual, que
se remonta a la época de Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battenberg, mantiene viva una c
ostumbre centenaria que refuerza los lazos históricos y culturales entre ambas naciones.
El
alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, presidió el evento destacando la importancia de esta
tradición que conecta a Sevilla con la familia real británica. “Esta tradición parte de
Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battenberg, quienes iniciaron esta costumbre de
mandar estas naranjas amargas del Alcázar a la familia real británica”, explicó Sanz, subrayando el valor simbólico de la
entrega en el Cenador de Carlos V, un lugar cargado de historia
construido por el emperador Carlos V con motivo de su boda con Isabel de Portugal.
Sanz también resaltó la singularidad de
Sevilla como “la ciudad de los naranjos”, con
más de 50.000 ejemplares, de los cuales 1.053 se encuentran en los jardines del Alcázar. “Estas naranjas forman parte de un rincón único de la ciudad... aquí se cultiva el
primer naranjo de Europa, plantado por el rey Pedro I”, añadió el alcalde, destacando la importancia histórica de estos frutos que se envían a la familia real británica para la
elaboración de mermelada.
Por su parte, el embajador Alex Elis expresó su gratitud por el gesto y reconoció el valor de mantener esta tradición viva. “Es un honor recibir este regalo de la abundancia de Sevilla”, afirmó Elis, quien además reveló sus
planes de elaborar la mermelada de manera especial. “Prometo al alcalde que voy a hacer esta mermelada... con un
ingrediente esencial que no es secreto, mi madre, que viene a España para hacer esta mermelada conmigo”, comentó el embajador, visiblemente emocionado por poder compartir esta experiencia con su familia.
Elis también destacó los
lazos culturales que unen a ambos países, mencionando la influencia británica en Sevilla, como la
fundación del Sevilla Fútbol Club por sus compatriotas escoceses hace más de un siglo. “¿Qué nos une como dos países, dos pueblos?... Yo creo que
nos une la cultura...
y el sabor magnífico de un buen Scotch whisky... de los barriles de vino de Jerez”, explicó el embajador, resaltando la conexión histórica entre ambas naciones.
Este año,
Sevilla ha enviado dos cajas con un total de 80 kilos de naranjas amargas, reafirmando su compromiso con una
tradición que ha perdurado a lo largo de los siglos. El alcalde Sanz expresó su deseo de que esta
costumbre continúe y extendió una invitación al rey Carlos III para que visite Sevilla, recordando que
el monarca ya tuvo la oportunidad de pasear por los jardines del Alcázar en 2011. “Quiero desearle al embajador que vuelva todos los años... y que le traslade a su majestad el rey Carlos III el afecto de la ciudad de Sevilla”, afirmó Sanz.
El embajador Elis confirmó su compromiso con esta tradición y
anunció que regresará a Sevilla el próximo año. “Es mi tercera vez aquí en sólo cinco meses como embajador y la verdad es una ciudad maravillosa”, aseguró, consolidando así la
continuidad de este vínculo histórico y cultural que une a Sevilla y el Reino Unido a través de un gesto dulce y simbólico.