Un hombre de 30 años de edad ha sido detenido en la madrugada de este sábado en Sevilla tras supuestamente eludir un control de alcohol y drogas cuando conducía un ciclomotor, y en el marco de una actuación policial en la que cinco agentes han resultado lesionados.
Según han informado fuentes municipales a Europa Press, el ahora detenido, además, ha dado positivo tanto en alcohol como en drogas --concretamente en opiáceos, cocaína y cannabis--, y los hechos se produjeron en torno a las 5,30 horas, cuando agentes de la Policía Local de Sevilla, adscritos a la Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento, realizaban un control de alcoholemia y drogas en la zona de Nervión.
Fue entonces cuando dieron el alto reglamentario al referido conductor, quien, "lejos de detenerse, zigzagueó con el ciclomotor hasta ponerse en la trayectoria del agente que le dio el alto, aceleró bruscamente al llegar a su altura y le golpeó en el brazo que portaba la señal luminosa".
En ese momento "comenzó su huida y la persecución policial para darle alcance", según han informado las fuentes municipales, que han precisado que, durante la persecución, el arrestado supuestamente rebasó "cuantos semáforos encontró en fase roja y se subió varias veces a las zonas peatonales, obligando a numerosos viandantes a apartarse para evitar ser atropellados".
Las mismas fuentes apuntan que "circuló en sentido contrario, haciendo lo mismo con los vehículos que encontraban de frente, cambió en varias ocasiones el sentido de su marcha, haciendo giros de 180 grados e ignorando temerariamente el peligro que creaba".
En otra de las calles se le volvió a cortar el paso, pero supuestamente "atravesó vehículos policiales y consiguió eludir nuevamente el control", y, al hacerlo, supuestamente le causó daños a un patrullero, hasta que, finalmente, "circulando por el acerado, al llegar a la puerta de acceso a una discoteca y debido al numeroso público, no tuvo más remedio que reducir su velocidad, hasta casi detener el vehículo".
Uno de los agentes consiguió alcanzarlo y presuntamente "recibió un puñetazo en el rostro por parte del conductor, y seguidamente se produjo un forcejeo entre el joven y hasta seis agentes, quienes consiguieron detenerlo", no sin que cinco de ellos de ellos hayan necesitado "asistencia médica como consecuencia de los puñetazos".
Una vez detenido e informado de sus derechos, fue trasladado hasta el lugar en que se realizaba el control y ha dado positivo en alcohol y tres tipos de drogas. Los agentes lo trasladaron a un centro médico para su asistencia, y finalmente hasta las dependencias policiales, donde ha quedado a disposición judicial.
El ciclomotor, "sin permiso ni seguro y propiedad del acompañante del detenido", ha sido trasladado por una grúa municipal y depositado en los almacenes del Parque de los Príncipes.