El sector hispalense del taxi ha celebrado este viernes una nueva reunión con el director general de Movilidad de la Junta de Andalucía, Rafael Chacón, para abordar el conflicto suscitado entre estos profesionales y los conductores de vehículos de transporte concertado (VTC). La reunión, según ha informado a Europa Press el presidente de la Unión Sevillana del Taxi, Fernando Morales, ha girado en torno a la ratio de licencias de VTC estipuladas en función del número de taxis, así como sobre las demandadas medidas de inspección.
El propósito de la reunión, según Morales, ha sido "hacer hincapié" en las principales reivindicaciones del sector del taxi en cuanto al mencionado conflicto, toda vez que ya a finales de junio, los taxistas sevillanos protagonizaban un paro de seis horas y una manifestación hasta el Parlamento de Andalucía, para reclamar a la Junta que se implique en el asunto.
Tal y como ha asegurado Morales, los taxistas sevillanos han pedido a Chacón que se cumpla la ratio de una licencia de vehículo VTC por cada licencias de 30 taxi convencional, aunque ha admitido que es "difícil" que la actividad se ciña estrictamente a esa proporción. Además, los taxistas han insistido en las medidas de inspección, porque "los VTC deben estar dados de alta y ejercer la actividad de forma regular, de modo que cumplan la normativa vigente y paguen sus impuestos", ha destacado.
Además, el presidente de la Unión Sevillana de Taxis ha acusado a la empresa de alquiler de coches con conductor Cabify de tributar en paraísos fiscales. "Queremos que haya una competencia leal, que tengamos las mismas obligaciones y derechos", ha insistido. Así, Morales considera que la reunión ha sido "positiva", aunque asegura que la Junta "ha puesto sus matices".
REGULACIÓN ESPECÍFICA
Y es que como se viene informando, los conductores de vehículos de transporte concertado están sujetos a una normativa diferente a la de los taxis y más restrictiva. El Reglamento de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres, recogido por Europa Press, especifica por ejemplo que los VTC "no podrán circular en busca de clientes ni propiciar la captación de viajeros que no hubiesen contratado previamente el servicio".
Pero a día de hoy, el sector local del taxi acusa a los conductores de VTC de repetidas situaciones de "intrusismo" y de "invasión" del ámbito de los taxistas, toda vez que estos conductores denuncian los continuados actos de "amenazas, coacciones e incluso agresiones" que estarían sufriendo a manos de taxistas.
La Brigada de Información del Cuerpo Nacional de Policía, en tal contexto, investiga actualmente a 27 taxistas, por presuntas coacciones y amenazas a otros taxistas y a conductores de vehículos con licencia de transporte concertado, con relación a los trayectos al aeropuerto hispalense de San Pablo, cuya parada estaría supuestamente acaparada por un grupo concreto de taxistas.
REGISTRO EN EL AEROPUERTO
Dentro de esta investigación, los agentes registraban recientemente la sede de la asociación Solidaridad Hispalense del Taxi, con fuerte presencia en el aeropuerto y sus instalaciones instaladas en el propio recinto aeroportuario.
Y mientras la Unión Nacional de Autoturismos (Unauto), que agrupa al sector de los vehículos de transporte concertado, ha elevado a la Fiscalía de Sevilla la "insostenible situación de violencia" que sufren los conductores que ejercen esta actividad en la capital andaluza, las asociaciones gremiales del sector del taxi se desligan de los altercados e insisten en que los conductores de VTC siguen incurriendo en situaciones de "intrusismo" respecto al campo de actuación de los taxis.