El concejal del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Sevilla Rafael Belmonte ha afirmado que el gobierno socialista ha incumplido el plazo de pago a proveedores "todos los meses de 2017", llegando a alcanzar una media que incluso llegó a "duplicar" el plazo legal, con 64,54 días.
En rueda de prensa, Belmonte señala que 64 es el promedio, pero que hay meses en los que se han alcanzado los "86, 98, 102 o 107 días". Añade que el pago por algunos entes dependientes del Ayuntamiento es "llamativo" y apunta a la Gerencia de Urbanismo, que ha abonado las facturas en hasta 91,8 días, o al Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS), que ha pagado en hasta 114,72 días.
"El Ayuntamiento no puede seguir en esta línea de falta de compromiso e irresponsabilidad. Los datos de 2016 ya fueron malos, pero es que los de 2017 son inadmisibles", advierte.
En este sentido, indica que el Consejo Económico y Social de Sevilla (CESS) y el propio interventor municipal ya han "alertado" de la situación, pero considera que "lo peor es la advertencia del Ministerio de Hacienda". "A finales de 2017, dicho Ministerio inició un procedimiento para la intervención al Ayuntamiento de Sevilla, junto a 22 municipios en toda España, por incumplimiento reiterado en el plazo para pagar a sus proveedores si la situación no cambiaba", añade.
Explica que esto supondrá que, si no se cumple, el Ministerio "retendrá recursos que el Ayuntamiento recibe del Estado para pagar con ello a los proveedores directamente ante su alta morosidad". "Y parece que a Espadas le da igual esta advertencia y a los datos de 2017 me remito. Es necesario poner pie a esta tendencia tan negativa para los intereses de Sevilla", insiste.
El concejal entiende que es una "temeridad" que una administración pública, "especialmente un Ayuntamiento, no pague a sus proveedores como debe" porque considera que "no genera confianza a los ciudadanos, no da seguridad ni estabilidad a las empresas al contratar, supone un freno al crecimiento económico, un riesgo para la solvencia de las empresas y las familias que las sustenta, todos sabemos cómo esperan que la administración les pague".
"El periodo medio de pago a proveedores es uno de los indicadores más claros de la situación de debilidad económica de la economía local. Ésta no es la actitud. Ya está bien de que los gobiernos socialistas adopten estas posturas egoístas", recalca, añadiendo que en 2012 "el PP tuvo que hacer un plan de ajuste para pagar 60 millones de euros, parte de la deuda de antes de 2011".
"Y más surrealista es esta actitud si se tiene en cuenta la ejecución de los últimos años. Sólo en el Ayuntamiento, sin entes ni empresas municipales, en 2016 sobraron 120 millones y en 2017, 144 millones", concluye.