Pive Amador presenta su Breviario de Sentimientos, en La Casa del Libro, calle Velázquez, el 10 de abril.
La obra se adentra en el pensamiento filosófico acerca de los sentimientos, tomando como punto de partida a Benito Spinoza pero atendiendo a la neurobiología actual, a la literatura en general y al leguaje popular.
Pive Amador visitó la redacción de Viva Sevilla.
¿Cómo está siendo la acogida a este libro?
–Pues bastante mejor de lo que pensaba. Hay que tener en cuenta que el libro no es sencillo. Mi esfuerzo se ha basado en conseguir hacerlo accesible al gran público. Que no haya que ser un iniciado o especialista en filosofía para entenderlo. Me interesa la literatura de divulgación y estoy sorprendido porque lo está entendiendo gente que yo pensaba que no lo entenderían. En ese sentido, estoy contento.
¿De qué fuentes ha bebido?
–El libro tiene la peculiaridad de que es un estudio de los sentimientos, que por primera vez se hace desde distintos puntos de vista. Parto, como figura en el subtÍtulo, “A Propósito de Spinoza”, de la filosofía de este judío de origen portugués que vivió la mayor parte de su vida en Holanda. Quizás sea el que ha tratado los sentimientos de una manera más concreta, precisa y rigurosa. Pero sólo es un punto de partida, también atiendo a la biología y la neurobiología, porque resulta muy curioso que muchas de las reflexiones que este señor realizó en el siglo XVII han sido constatadas por los científicos, siglos después. Atiendo a la literatura en general y a una cosa muy curiosa, que es que gracias al lenguaje popular podemos ver que los sentimientos pueden tener distintos significados, dependiendo de cómo se utilicen. Y en eso nuestro idioma es muy rico.
En estos tiempos de inmediatez y exposición continua en redes sociales, ¿qué papel deberían tener los sentimientos?
–El gran problema de las redes sociales es la inmediatez y que la gente no se para a pensar las cosas antes de escribirlas públicamente. La gente cree que reaccionar es pensar, pero pensar requiere tiempo, y eso es lo que no hay en las redes. Hay que pararse a pensar…
Nueva presentación el próximo 10 de abril en La Casa del Libro
–Sí, y habrá más en otras ciudades como Huelva, Cádiz, Málaga y muchas Ferias del Libro que comienzan en breve a desarrollarse.
No es su primera aventura literaria, ¿en qué se diferencia el Breviario con sus anteriores libros?
–Pues una muy clara, es mi sexto libro, pero el primero que no trata sobre la música. Por lo que, de algún modo, sí es mi primera aventura literaria.
Es imposible hablar con usted y no nombrar al rock sevillano y al gran Silvio. ¿Cómo cree que está actualmente el panorama rockero en Sevilla? ¿Hay dignos sucesores del maestro?
–Creo que el rock sevillano goza de buena salud, hay bandas que hacen cosas muy interesantes. Me encantan, por ejemplo, Al La Glory, y otras bandas. Pero es indiscutible que el rey no tiene sucesor, ni siquiera en su hijo, que es muy bueno, pero es otra cosa. Si Silvio se encontrara ahora con Sammy y lo viera en un escenario, seguro que le diría, “niñato” (Risas). Silvio era un filósofo, incuestionablemente. De hecho el libro termina con una frase suya, “Mientras vivo, estoy contento”, que pronunció poco antes de morir.