El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila (CDC), ha asegurado este jueves que la Generalitat está dispuesta a ir ante el Tribunal Constitucional (TC) y el Tribunal Supremo (TS) si finalmente el Gobierno central recupera el trasvase del Ebro.
En respuesta a una interpelación del diputado de ERC Lluís Salvadó, Vila ha explicado que contempla varias vías legales para combatir ante los tribunales el trasvase, una de las cuales es "un recurso de competencias ante el TC", puesto que el Gobierno invadiría competencias autonómicas al promover esta infraestructura, como fauna, pesca continental, regulación de los espacios naturales y medio ambiente.
También ha asegurado que el Gobierno catalán está dispuesto a presentar un recurso por la vía contencioso-administrativa al Tribunal Supremo (TS) "si se ponen en riesgo las funciones ecológicas del río y del delta" y si los planes del Estado suponen una alteración del ecosistema.
Según Vila, las intenciones del Gobierno central se alejan del espíritu con el que se redactó la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea (UE), puesto que "no se atiende" el respeto al caudal ecológico necesario que debería tener el río Ebro en su curso final para garantizar la continuidad del delta.
El diputado de ERC Lluís Salvadó ha asegurado que, si Cataluña fuese independiente, podría "apelar ante Naciones Unidas" por cómo el Estado gestiona el agua, y ha abogado por que la Generalitat tenga el mismo trato que tienen las autoridades portuguesas con el río Tajo, que nace en España y desemboca en Portugal.
Según Salvadó, las intenciones del Gobierno incumplen los criterios técnicos de la directiva comunitaria y "se pasan por el forro los criterios científicos", porque de los 14.600 hectómetros cúbicos que ha tenido el río en su tramo final de media en los últimos 20 años, se hipoteca el futuro de 10.800.
Por otra parte, y en respuesta a una interpelación de CiU, el consejero de Agricultura y Medio Natural, Josep Maria Pelegrí (UDC), ha destacado el compromiso del Govern con el Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA) con la "continuidad institucional" de este ente público, para garantizar su futuro y que no esté sometido al juego político.
