Montar una tienda de mascotas no es una cosa nueva. El afecto que le tiene a los animales se traduce en querer colaborar y trabajar de todas las maneras posibles, siempre y que esto signifique estar en contacto con mascotas, compartir con sus dueños los consejos y experiencias adquiridos, y poner el mayor esfuerzo en consolidarse como un trabajador independiente, con una tienda que abre y cierra cuando esa persona lo decida. Una tienda de mascotas es trabajar sin darse cuenta de que es un trabajo. Es disfrutar.
Una franquicia siempre es mejor que comenzar solo
La franquicia de tienda de mascotas entra cómodamente en las categorías de franquicias rentables, porque tienen un retorno de inversión muy alto, y en franquicias económicas, porque iniciar una no tiene un coste inaccesible y cualquier interesado con unos ahorros decentes podría invertir desde ya mismo en su primera franquicia.
Las franquicias dan algo que en este mundo competitivo es vital: reputación. La reputación que brinda una marca consolidada en el mercado es 10 veces superior a la reputación de una marca que debuta en un nicho tan íntimo como las mascotas. Y no porque no se pueda hacer de otra manera, pero, sin lugar a dudas, evita muchos tropiezos y dificultades.
Ofrecer solo las mejores marcas del mercado
Con una franquicia ya esto estaría garantizado. De cualquier modo, a la hora de entrar al negocio de las mascotas no sólo deben ofrecerse los mejores productos, sino que la persona debe estar en la capacidad de asesorar y sugerir por qué un producto X sería mejor que un producto Y, o viceversa. Más que ofrecer las mejores marcas, es hacerle ver a los clientes cuáles son los productos más recomendables para su problema puntual. Y no se cuenta con el producto, saber aceptarlo antes de darle alguno que no le funcionará.
Considerar especializarse en especies de mascotas
Esta consideración debe suceder más temprano que tarde. El nicho de mercado de las mascotas es muy competido, y para destacar por sobre el resto debe tener una u otra cosa. La primera es un capital superior, para poder invertir en marketing y llegar a más potenciales clientes. La segunda es capacidad de alejarse de la manada, para quedar en un nicho de mercado donde hay muchos clientes, pero nulos competidores. Especializarse en razas de perros, gatos, y hasta pajaritos, no sólo da la oportunidad de tener clientes frecuentes y hasta fijos, sino que consolida al dueño de la tienda como un experto en esa raza de animales.
Ofrecer asesoría gratuita en términos de salud y cuidados básicos
Y un buen experto en animales no sólo debe estar sediento por vender sus productos. También debe tener la paciencia y el tacto suficiente para educar a los dueños de mascotas sobre las tareas que pueden hacer en casa, por sí solos, para que su animalito esté cada día mejor, y en lo posible, evitando que se enferme. Dentro del discurso preventivo, incentivar la compra de un par de suplementos vitamínicos no es delito, pero es algo que se tomará mucho mejor que iniciar vendiendo todo el catálogo, sin querer ayudar un poco.
Tener una fuerte presencia digital y destacar por sobre el resto
Una página web propia, con dominio personalizado. Cuentas en Facebook, Twitter, Instagram. Son necesidades de las pequeñas tiendas y uno de los métodos más sencillos de llegar a grandes audiencias. Compartir contenido único y relevante en cada una de estas plataformas será el condimento suficiente para que más y más personas se enganchen a tu marca. Y mientras más personas estén conviviendo con el día a día de las redes y la web, existirán muchas oportunidades adicionales de ventas, clientes frecuentes, y hasta contactos para colaboraciones.
Considerar trabajar con entregas a domicilio
Los motivos pueden ser diversos, y siempre habrá alguien que necesita comprar medio stock disponible, pero no puede pasar a buscar los productos. Para evitar perder un buen cliente, es mejor tener un servicio de entregas a domicilio. Al comienzo pueden ser sólo en la ciudad en la que opera la tienda. Luego, con ayuda de servicios de encomiendas, puede extenderse a todo el país.
Aquí también cabe ofrecer el servicio de descuentos o de envío gratuito tras alcanzar un monto específico en el pedido. Un ganar-ganar, le dicen.
Iniciar cuanto antes un programa de clientes VIP
Más de la mitad de los clientes que vengan una vez a la tienda, volverán. Es por eso que premiarlos con condiciones de clientes VIP fomentará su compromiso con tu marca. Ya no se tratará de ir a comprar productos, sino de una responsabilidad compartida en la que ambos disfruten de la experiencia. Tener clientes VIP es el primer paso para tener personas que hablen bien de la tienda de mascotas, porque siempre se habla de las mascotas y de cómo les tratan en cada sitio.
Apalancar hasta el punto de sólo trabajar bajo referencia
Relacionado con lo anterior. Al contar con un manojo importante de clientes, se puede iniciar un programa de referidos donde cada cliente VIP gane un porcentaje por el consumo de los nuevos clientes que refieran a la tienda. Una estrategia tan añeja como el multinivel, pero que sigue funcionando con una eficacia nada despreciable.
Trabajar arduamente, con mucho tesón
Lo demás, ya lo debe conocer. Levantarse temprano, acostarse tarde. Trabajar con mucho orden y disciplina para que la tienda de mascotas sea un sitio de religiosa visita por clientes, y sus peludos amigos.