El virtual candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, rechazó hoy celebrar un debate televisado con el aspirante presidencial demócrata Bernie Sanders, dos días después de haberse mostrado abierto a ello.
El miércoles por la noche, durante una entrevista en el programa de Jimmy Kimmel, Trump se declaró dispuesto a participar en un cara a cara con el senador Sanders, siempre que las ganancias del debate fueran para alguna organización o iniciativa benéfica.
Pero hoy, en un comunicado divulgado por su campaña, el polémico magnate dijo que, dado que desde este jueves tiene asegurada la candidatura presidencial republicana con el apoyo de los 1.237 delegados necesarios, sería "inapropiado" celebrar un debate con Sanders.
Así, Trump sostuvo que esperará a debatir con quien obtenga el "primer lugar" en la contienda por la nominación presidencial demócrata, "probablemente" la ex secretaria de Estado Hillary Clinton.
Mientras, tras haber declarado desde el principio su disposición a debatir con Trump, Sanders emitió hoy un comunicado en el que afirmó que espera que el magnate cambie de nuevo de opinión, dado que hay "varias cadenas" de televisión que se han ofrecido a organizar el evento y "donar fondos" para causas benéficas.
Sanders enfatizó que, en "prácticamente todas" las encuestas nacionales sobre intención de voto de cara a las elecciones de noviembre, él se impone a Trump, "a veces por márgenes muy grandes", y, por tanto, los estadounidenses deberían tener derecho a ver un debate entre ambos.
Aunque Sanders no tiene opciones reales de arrebatar la candidatura presidencial demócrata a Clinton, ha prometido permanecer en la contienda hasta la convención que el partido celebrará en julio en Filadelfia.