Se cumplieron las previsiones y el primer día de la huelga de un mes convocada por el sector de la vid para reclamar mejoras laborales en un nuevo convenio colectivo paralizó este miércoles la producción en las principales bodegas del Marco, principalmente “a nivel de Jerez”.
Los sindicatos cifraron el seguimiento de los paros por parte de los trabajadores en un cien por cien, especialmente los empleados de los centros de producción, que se concentraron a las puertas de las bodegas.
Salvando el caso de algunas firmas del Grupo Estévez en las que los camiones tuvieron que hacer su entrada escoltados por la Policía Nacional, que también tuvo que intervenir en el cambio de turno (de 14.30 a 15.00 horas), el primer día de la huelga transcurrió sin incidencias destacables.
Eso sí, las protestas del personal dejaron estampas inusuales en los accesos de más de una bodega, donde los trabajadores permanecían vigilantes mientras los autobuses descargaban o recogían a los turistas, que no escogieron la mejor fecha -sin lugar a dudas una de las de menos actividad del año- para conocer estos atractivos turísticos en profundidad. La culpa, en cualquier caso, no fue de ellos.
Hasta el cierre de esta edición, desde los sindicatos descartaban tener “información oficial” por parte de la patronal bodeguera Fedejerez, aunque admitieron que ven “probable” que desde esta organización les convoquen a una reunión para este jueves ante la repercusión del primer día de una huelga que no ha hecho más que empezar.
Por esta razón, confían en que “haya cordura” por parte de la patronal tras advertir que los trabajadores -casi 900 están llamados a la huelga- “ya hemos cedido bastante”. Hay que recordar que la decisión de los trabajadores del sector de la vid llega tras un periodo de negociación del convenio colectivo en el que la patronal no ha aceptado las reivindicaciones del personal para recuperar los derechos perdidos en el último convenio por la crisis económica.
