La comparsa de Kike Remolino estaba en las quinielas de todos los aficionados desde el pase de Preliminares y llegó a la fase de Semifinales con las opciones intactas tras el buen sabor de boca dejado también en Cuartos.
El primero de los pasodobles, cantado desde el punto de vista de un padre que asiste a la boda de su hija con otra mujer, supuso una dura crítica a la homofobia. El segundo fue un bello piropo a Andalucía para acabar criticando a la Junta.
Los cuplés, para su pareja y los vapeadores; y para Canal Sur y la morralla.